MARTXA, MARTXA CON NUESTRA FANFARRE!! (QUE USTEDES LO PASEN BIEN) )

28/2/12

JOSEBA IRAZOKI DEMOSTRÓ SER UN CRACK EN BLACK ROSE




BLACK ROSE acogió la novísima apuesta de JOSEBA IRAZOKI, el versátil, polifacético e inquieto crack de Bera interesado tanto por la composición como por la improvisación. Dicha noche, el imprescindible músico compareció en solitario; en formato one man band, encargándose, además de cantar, de todo lo relacionado con programaciones & efectos de sonido varios, así como  de hacer sonar guitarras, armónica, txistu y bombo. ¿El objetivo final? La creación de un acompasado caos de ritmos y sonidos mediante el disparo de genuinas composiciones de diferentes calibres. Pura psicodelia norteña de sugerente latido country rock. Una propuesta artística tan sorprendente como inclasificable.



24/2/12

CRÍTICAS DE FEBRERO: VITA IMANA, HAMLET, TAIL DRAGGER, LA RÚA 44, INSOLENZIA...


Sí y no

Concierto de Hamlet


Fecha: sábado, 18 de febrero.
Lugar: Sala Tótem, Atarrabia.
Intérpretes: Hamlet, formación integrada por Molly a la voz, Luis y Alberto, a las guitarras, Álvaro al bajo y Paco, a la batería. Como teloneros abrieron Vita Imana.
Incidencias: presentación de Amnesia, nuevo CD del grupo. 2 Horas de duración, bises incluidos.

Sí, pero no. Bien, pero no del todo: y no por cuestiones técnicas o de sonido. Aprobado con objeciones y matizaciones –más bien-, he aquí qué nota hemos de poner a Hamlet si tenemos en cuenta factores como los siguientes: las expectativas generadas por la maquinaria publicitaria con las bondades de su nuevo disco de fondo y lo que se espera, al menos, a priori, de un concierto suyo: un show como los por ellos protagonizados en numerosas ocasiones en la vieja sala Artsaia, con los comandados por Molly transformando la misma en una olla a presión. Así pues, división de opiniones –como mucho-, que dirían los críticos taurinos: he aquí, necesariamente, a qué expresión hemos de recurrir para valorar este concierto.
La noche arrancó de manera incontestable con Vita Imana, banda que, principal reclamo del cartel para algunos de los presentes (limitándonos nosotros a plasmar en estas líneas lo que nos hicieron saber unos cuántos espectadores), puso la nota de calor a la velada, convenciendo totalmente al público con su actuación: con un más que vitamínico y encabritado pase erigido sobre una brutal concepción del metalcore; en feliz maridaje con el hardcore, perfectamente sostenido su hecho musical sobre una poderosa base rítmica conformada por bajista, baterista y percusionista, con este último (ésta, toda vez que era de sexo femenino), haciendo por momentos las labores de segundo baterista, a tenor de la espectacularidad de su set y de su pegada. Y sí, imagen, sentido del ritmo y actitud, vaya que si Vita Imana convencieron, demostrando durante los 30 minutos de que dispusieron porte, capacidad y entidad suficiente como para aspirar a más altas metas. Para ser a la mayor brevedad cabezas de cartel: no en vano dicha noche arrollaron en cierta medida a las presuntas luninarias del mismo, los madrileños Hamlet.
Sobre un escenario presidido por una estética más que cuidada, con paneles alusivos al grafismo de su nuevo CD ocultando las pantallas de sonido y flanqueando la grandiosa batería; frente a un público que se dio cita en un número discreto teniendo en cuenta los llamados a estar sobre el mismo, referentes en toda regla de la escena metálica estatal, la actuación arrancó de manos de temas nuevos como Un mundo en pausa, Mi soledad o Entre la niebla, composiciones que, recibidas sin excesiva efusión, dejaron en el ambiente sensaciones encontradas: que la banda sigue sonando bien y que sus músicos continúan vaciándose en directo -por un lado-, pero por otro… Que los temas nuevos no llegan como los de antaño. Que, al entender de muchos de sus seguidores, les falta una mayor definición y les sobra envoltorio melódico y dispersión estilística, provocando sus interpretaciones cierta indiferencia entre el público: algo percibido por Molly –fuera de toda duda- a juzgar por cómo trató de arengar a sus seguidores durante la ejecución de otra de las nuevas, Deja vu: “¿sigue ahí fuera Iruña?” “Iruña, ¿es Hamlet? ¿Es el frío?” “¿Ha venido Iruña esta noche?”, que a viva voz se preguntó.
Iruña sí; en mayor o menor medida, estaba allí. Acudió dicha noche. Y tan predispuesta a cantar y a pasarlo bien con la banda que incluso pagó previamente en taquilla. Así pues, si tal y como sucedió durante la primera parte de la actuación, marcada por la presentación de nuevos temas, los presentes no participaron en exceso, no fue por falta de predisposición; tal vez quienes no estuviesen allí fuesen ellos. Los Hamlet esperados por la ciudad -a tenor de lo ocurrido en la segunda parte-, fase en la que de manos de clásicos como Tu medicina, J.F., Egoísmo, Irracional o, ya en los bises, Dementes cobardes, tras las reticencias iniciales, se hizo el calor. El sí, tras cierta sensación de no...


VITA IMANA, ¡¡BRUTALES!!


Carril blues

Concierto de Tail Dragger


Fecha: viernes, 27 de enero.
Lugar: Sala Tótem, Atarrabia.
Intérpretes: Tail Dragger, a la voz, acompañado por Quique Gómez, a la armónica, José Luis Pardo, a la guitarra, David Salvador, al bajo, y Pablo Bárez, a la batería.
Incidencias: concierto organizado por la asociación de Blues de Burlata. Entrada  aceptable; público de ambos sexos y media de edad alta que se mostró participativo.  Hora y ¼ de duración, bises aparte.

A dos meses vista de la última edición del Udazkena Blues (y a cinco de la celebración  del veraniego Burlada Blues Festival), la animosa asociación Burlada Blues Bar se lió de nuevo la manta a la cabeza con un fin; doble, pero uno en sí mismo: recordar al público en general que siguen estando ahí, al pie del cañón, y que el blues, su pasión y verdadera razón de ser, sigue estando ahí, algo que quedó más que claro de la mejor forma posible. Con la comparecencia de uno de los grandes del género, el estadounidense Tail Dragger.
Perfectamente escoltado por dos igualmente grandes, el bonaerense José Luis Pardo y el madrileño Quique Gómez, ante una asistencia incluso mejor que la esperada (teniendo en cuenta factores como el público al que va destinado este tipo de conciertos, minoritario y de circunstancias muy definidas), la sesión, en esencia, se tradujo en setenta y cinco minutos de tirón de interpretaciones de blues de muy alto octanaje; sucio –en lo que a concepción del mismo se refiere- y arenoso en lo relativo a connotaciones; elegante y salvaje a un tiempo… e impecablemente plasmado. De puro sabor genuino. En la plasmación de un hecho musical perfectamente liderado por la presencia de Dragger (Arkansas, Chicago, 1940), viejo bluesman de timbre totalmente añejo al que, visto lo visto, sólo jubilará la vida, en última –y única- instancia. Que solo dejará la vida artística… por imperativo vital, a la vista del fervor que sigue cosechando ¿su presencia? Su buenísimo hacer, más bien. Un músico que, sombrero vaquero cubriéndole la testa, con los pies en el suelo (e incluso bajando a cantar a pie de suelo en ocasiones), llevó las riendas de la noche a la perfección, cabalgando al frente de la banda derrochando arte y soltura por igual. Blues con clase por medio de la clase de blues impartida, lo que, en líneas generales, fue el concierto: erigido a dos velocidades, en clave de interpretaciones de slow blueses y característico rhythm´& blues, sobre unas composiciones ricas en pasajes y parajes de diferentes intensidades sonoras y, en todo momento, alrededor de largos y, aunque más o menos esperados, sugerentes desarrollos; vamos, como los kilómetros de la Ruta 66, para los enamorados de la misma.
Sobre unos temas en cuya ejecución brillaron con luz propia el argentino José Luis Pardo por su forma de tocar la guitarra, ya al servicio del equipo, ya al de su arte en solitario, demostrando ser un Messi de las seis cuerdas; y perdón por la comparación, habiendo recurrido a dicha herramienta para asegurarnos que nos entendemos a la primera (guitarrista que incluso buscó el santo grial del minimalismo sonoro absoluto desde el borde del escenario), y Quique Gómez, corriendo de su cuenta la exquisita  ornamentación a cargo de la armónica; bueno, ornamentación… O más, siendo las notas por él desgranadas más que meras guirnaldas, como fueron.
Frente a un público que, en medio de un ambiente distendido, le piropeó y jaleó, circulando por el unidireccional carril del blues, vía de sentido casi único que apenas permite desvíos, Tail Dragger compareció en Iruñerria como la personificación del legendario género, digámoslo claramente; y, por otra parte, como el espejo en el que puede ir empezando a mirarse buena parte de la escena rockera estatal, pues los años no pasan en vano. Tail Dragger: y el blues se hizo carne, habitó entre nosotros y cantó en Tótem… a mayor gloria del género. Y de sus entusiastas incondicionales. Enorme.



Haciendo de tripas corazón

Concierto de Insolenzia


Fecha: sábado, 28 de enero.
Lugar: El Bafle, Donibane.
Intérpretes: Insolenzia, banda formada por Daniel Sancet, a la voz, Isabel, a la voz, a las guitarras acústica y eléctrica y a los coros, Félix y Miguel, a las guitarras, Daniel, al bajo, y Chuan Pablo, a la batería. Como teloneros abrieron velada La Rúa 44.
Incidencias: presentación de Me quema el sabor de tus ojos, nuevo CD de Insolenzia. Asistencia muy escasa.

Decepción, he aquí la palabra que mejor encaja a la hora de explicar lo vivido –y deparado- por el principal reclamo del cartel ofertado por El Bafle dicho viernes: y ateniéndonos tanto a lo que sintieron los aragoneses Insolenzia al comprobar de primera mano su capacidad de convocatoria, nula –prácticamente-, dato significativo a la vista de que estuviésemos en una noche totalmente despejada de conciertos, como a lo que sintió quien rubrica estas líneas a una con el desarrollo de su directo. Decepcionante, el mismo. Y es que, lamentándolo mucho (no tenemos nada contra nadie: es más, asistimos a verles con ilusión, presos de la curiosidad), sintiéndolo de verdad, así fue su actuación: todo lo contrario que la ofrecida por los presuntamente teloneros, jovencísima pero más que preparada banda que dio la de cal, haciendo buena nuestra personal versión en clave de crítica musical del cuento de David y Goliath: érase una vez un grupo telonero que se subió a las barbas del grupo principal y…. Toda vez que La Rúa 44 no sólo se les subieron a las barbas, sino que incluso llegaron a hacer cumbre arriba, más arriba: a tenor de lo visto, por méritos propios y todo hay que decirlo, también por deméritos ajenos, en la mismísima cima del cartel.
Haciendo de tripas rock & roll, ante una desangelada sala, pasadas las 22.40 horas subieron al escenario los chicos y chica de La Rúa44, sexteto estellica al que conocimos en 2011 en la denominada Apertura Paralela y que sacó adelante su repertorio de manera sorprendente. Sorprendentemente buena; un extenso setlist que, apoyado en las canciones de Leyenda, su primer álbum, pivotando las mismas entre los sabores más celtas y clásicos del rock, encontraron en el clarinetista su hecho diferencial, desempeñando en la banda dicho músico el papel del violinista de Mägo de Oz. Unas composiciones que dejaron en el ambiente la sensación de encontrarnos ante un grupo hecho; pese a la juventud de sus integrantes, frente a una formación cuya trayectoria sólo puede ir a mejor. Lo mismo que, por muy diferentes razones, denotó la actuación de Insolenzia, banda cuyo directo dejó entrever un preocupante quiero y no puedo; grupo cuya comparecencia nos hizo ver el porqué de que su presencia en Iruñea, ya a priori, no llamara la atención; pero, visto lo visto, ¿cómo hacerlo en la capital estatal del rock? ¿Cómo, en una de las cunas del rock (Barricada, Txarrena, Koma, Marea, Bocanada…) cantado en castellano? Y es que, a la vista –se quiera reconocer o no- de la sempiterna diferencia de nivel existente entre las bandas de aquí y las del resto del Estado, tal vez por la piel de toro Insolenzia congregue gente en sus conciertos e incluso coseche seguidores, pero por estos lares, haciéndolo como lo hicieron, difícil. Muy difícil. Dificilísimo, presentándose como se presentaron: con un frontman que abrigo rojo y sombrero, en todo momento trató de emular la imagen en escena de Kutxi Romero, y con una vocalista que cantó fuera de tono casi todas ocasiones. En resumen, que más que sus canciones, Insolenzia mostró lo siguiente a las escasas personas congregada: tener muchos aspectos que cuidar… Y que mejorar. Que tienen que trabajar duro, así como buscar un sonido y una personalidad propia, más allá de tratar de reproducir esquemas ya inventados: esto es lo que nos sugirieron, tratando de hacer ellos en sus ya reseñadas circunstancias de tripas rock & roll… y el arriba firmante, a la hora de contarlo, de ellas, corazón. Poco más...

21/2/12

HONORIS CAUSA PASARON POR BLACK ROSE




Conocidos por tierras navarras por haber sido los ganadores del certamen BERRIROCK 2010, la formación burgalesa HONORIS CAUSA presentará en BLACK ROSE Ciclos, CD grabado en 2011 en los Estudios Higain de Usurbil con Haritz Harreguy como productor y masterizado en Mamia Estudios, Azkarate, Navarra, por Jonan Ordorika; de manos de este trabajo, el grupo da otra vuelta de tuerca a su estilo, reivindicándose el mismo, destilando un sonido maduro y homogéneo, como más fresco y contundente. ¿El secreto? Melodías pegadizas que enganchan a la primera y que ganan con cada escucha posterior. Ciclos ofrece seis temas de rock abierto que, facturado sin complejos, destilan un sonido limpio, maduro y homogéneo; fruto de una producción moderna, colorista y personal, he aquí la apuesta de HONORISCAUSA más ambiciosa hasta la fecha.
Embarcada la banda en plena gira de promoción de Ciclos, su discografía se completa con trabajos como La Salsa del Pueblo (2001); Ceniza (2005). Honoris Causa E.P. (2007) y Reset (2009).







16/2/12

ENORMES, THE FOXY LEIRES: BIEN!!


Directamente desde Bilbao el JUEVES 16 aterrizaron en BLACK ROSE The Foxy Leires,  grupo tributo a Jimi Hendrix; trío (respetando el formato en el que siempre actuó  Hendrix, a excepción de en el concierto de Woodstock) de potente y contundente directo cuya actuación se tradujo en un intenso tsunami de blues rock y hard rock.
Al igual que hiciera el inmortal guitarrista de Seattle, The Foxy Leires se apoyó en gran medida en la improvisación, satisfaciendo plenamente a los más exigentes: tarea no fácil a priori, a la vista del número de maestros de las seis cuerdas que se dieron cita en el local: así pues, enormes. Volverán!!







10/2/12

KHAMÛL EN BLACK ROSE: GRANDES!!!




Una semana después de abrir nuestras puertas a los noveles Indecent-Ez, pasaron por el Black los veteranos KHAMÛL, intratable y referencial banda de ‘metal-core cannábico’ con  cerca de quince años de carrera y cuatro discos en su haber, La Flor (2002), En la habitación (2004), Involución (2007) e Ilusionista, presentado en 2011. Incontestable banda que, pura carne de directo, regresó con inusitadas ganas, tras unos meses de parón.  Bueno, tras unos meses y una hora de retraso sobre el horario previsto, por asunto laboral relacionado con uno de los músicos: así las cosas, diremos que en un día tan señalado como el 14 de FEBRERO, KHÂMUL, como las novias, se hicieron esperar...

Ilusionista, CD que presentará KHAMÛL dicho martes, es una bomba de relojería. Un explosivo cóctel de canciones a prueba de artificieros –directamente-, más que de críticos musicales; un álbum de ‘diez’ en la escala de Richter integrado por idéntico número de composiciones: el disco con el que los comandados por Mikel se han tirado directamente a la piscina, y, como no podía ser de otro modo, a lo bomba. A degüello,  salpicando por doquier; preocupándose únicamente por nadar en el proceloso mar de acerado metal, decibelios y ritmos acelerados por ellos generado, más que de guardar la ropa; sin haberlo hecho previamente tan siquiera, mirar si había agua en la pileta; una banda, Khâmul, que en esta ocasión ha ido directa a la esencia del huracán. A por todas. Al ojo de la kaña sin rodeos, pariendo un disco realmente bestial. ¿Que por qué no destacamos ningún tema? ¡Imposible dejar alguno fuera!



KHÂMUL, MARTES 14 DE FEBRERO A PARTIR DE LAS 21.00 EN BLACK ROSE


8/2/12

ELENCO, BRUTALES EN BLACK ROSE!! LA CRÍTICA!!!




Elenco es un grupo de rap-metal procedente de Logroño, La Rioja, ciudad que les vio surgir en 2008. Ganadores en 2009 de un concurso organizado por la Sala A&K, graban su primer disco, publicado bajo el nombre de Ajuste de cuentas. En dicho 2009, igualmente, consiguen un segundo premio en el concurso de temas musicales de La Gota de Leche (unidad de juventud del Ayuntamiento de Logroño), ganando tan solo unos días después el primer premio en el de bandas musicales de Logroño "Concert Ebro 2009", así como el premio del público.

2010 se presenta para Elenco como un año en el que Ajuste de cuentas es presentado por todo el Estado, hasta sumar treinta y dos conciertos en total. Finalmente, en verano de 2011 graban su segundo disco, Un grito de esperanza: trabajo que presentarán en BLACK ROSE. 

Elenco es el resultado de las inquietudes de cinco jóvenes que vienen de estilos musicales distintos, pudiéndose escuchar estilos como el rap, el rock, el metal o el hardcore en sus actuaciones; los directos  son su verdadero plato fuerte






Esquirlas de rap y metal

Concierto de Elenco


Fecha: jueves, 9 de febrero.
Lugar: Black Rose, Burlata.
Intérpretes: Elenco, banda formada por Estrés, a la voz, José, a las guitarras, Dani, al bajo y a las segundas voces, Dj Rapha, a los sintetizadores, a los samplers, a los scratches y a las voces, y Valpu, a la batería.
Incidencias: presentación de Un grito de esperanza, segundo CD de Elenco. 1 Hora y 10 minutos de duración, bis aparte. Asistencia aceptable, público entregado.

Sorprendieron y mucho, gratamente, los logroñeses Elenco en su visita a Burlata, y lo hicieron en una nueva noche en la que la climatología, a priori, dio la sensación de posicionarse contra la música en directo; pero, afortunadamente, pese a que al grueso del respetable le costó llegar, finalmente se juntó una bonita cantidad de personas. Un público que, impactado por la autenticidad y brutalidad del concierto presenciado (decir que la banda lo dio todo sería poco, en este caso), terminó rendido sin ambages; entregado al buenísimo hacer de Elenco.
La agresiva descarga de potencia y energía, he aquí qué vino a ser su actuación (sin que lo afirmado pueda pasar por pleonasmo), se centró en la puesta de largo de los temas de Un grito de esperanza, composiciones que, explosivas; detonadas cual granadas, retumbaron y cómo en manos del quinteto, disparando a discreción pura metralla sonora. Salpicando el local con sus incandescentes esquirlas sonoras de rap & metal,  perfectamente dirigidas por las voces de los jovencísimos Estrés y Dani, enormes, los dos. Puros pura sangre a los micrófonos, pura actitud sobre el escenario. Bueno, y en el caso del primero, también fuera del mismo, bajando como bajó a pie de bar a cantar; en cualquier caso, perfectas puntas de lanza ambos de un elenco que lo dio todo, ante la estupefacción general –en un primer momento- y, posteriormente, frente a la entrega de los presentes, pequeña representación riojana incluida. Y enormes, inconmensurables igualmente DJ (cantándose algún tema desde la primera línea de fuego), guitarrista y baterista, quienes hicieron gala de un inusual salvajismo sonoro en aras de tratar de ¿domesticar?  De someter –más bien- sus respectivos instrumentos, demostrando el quinteto en general una perfecta compenetración: algo, en otro orden de cosas, imprescindible estando como estaba de por medio el hip hop. Sí, pese a hacerlo bajo tan  imponente y metálico caparazón.
Se dejó sentir con fuerza en Black Rose el huracanado, metalizado y rapeado grito de esperanza proclamado por Elenco, banda que, procedente de Logroño, tierra rica en vinos, rock con buqué (EnBlanco) y heavy metal (Tierra Santa, Ethos), protagonizó un auténtico tsunami de notas musicales, ritmos airados y decibelios, no dejando indiferente a nadie con sus canciones; con sus disparos dialécticos contra todo tipo de controles: el mental,  auspiciado por políticos y religiones; el control social y policial o contra el ejercido por los actuales cánones de belleza. Más bien, conquistando con su directo a un público que, desconocedor en un principio de su hacer, convencido y noqueado al final, terminó pidiendo más con verdadera insistencia, siendo premiado dicho requerimiento con la repetición de un tema ya tocado. Siendo agasajados así  por unos músicos que, cosa de su desgaste físico tras una intensísima hora de actuación (qué difícil tratar de canalizar con palabras el torrente de energía presenciado), sudorosos, terminaron agotados: como el vocalista, quien, además de moverse todo el tiempo como un espasmódico resorte, tuvo a bien incluso cantar el último tema haciendo el pino y bailando breakdance, permitiéndonos dicha estampa comprobar que no llevaba muelles en las suelas: bueno, demostrando a tenor de lo visto llevarlos la banda en su conjunto, qué descaro y qué impulso, en el corazón. Volverán por estos lares, avisados estáis. Así sí.


4/2/12

BARRACUS ABRIERON LAS PUERTAS DE SU GRAN HOTEL: LA CRÍTICA





Hotel de muchas estrellas

Concierto de Barracus


Fecha: viernes, 3 de febrero.
Lugar: auditorio de Barañáin.
Intérpretes: Barracus, formación integrada en directo por Gussy, a las guitarras y a la voz, Lucas, a las guitarras, a la voz, y a la armónica, Raúl, a la guitarra eléctrica, Kike, al bajo, Carlos Colina, a los teclados, y Dani, a la batería.
Incidencias: presentación de Gran Hotel, segundo CD de Barracus. Hora y 10 minutos de duración. Asistencia aceptable, público participativo.

Al calor de los suyos –tanto sobre como bajo el escenario- y de sus nuevas melodías, Barracus abrió las puertas de su sensacional Gran Hotel en Barañáin, mostrando a cuantos acudieron al Auditorio la luminosidad y claridad de la práctica totalidad de sus habitaciones, con motivo de su presentación oficial: de la puesta de largo de la segunda colección de canciones de Gussy y Lucas, dúo cuya solvencia artística y buen hacer lleva tiempo mandando a discreción señales con un inequívoco mensaje: mostrando su  potencial poco menos que innato para subir como la espuma, desde que ambos aunaron sus caminos. Y eso, una gran proyección, volvieron a transmitir en la presentación de  dichas habitaciones con forma de canciones.
A la vera de la proyección en la pantalla del videoclip de Olvídate de mí, primer single de Gran Hotel, la velada arrancó con Gussy cantando dicho tema acompañado por el teclista únicamente, músico al que prácticamente de inmediato se fueron sumando Lucas (cómo se complementaron y retroalimentaron las voces de ambos, residiendo ahí parte del éxito de Barracus) y, por este orden, baterista, bajista y guitarrista: elenco que, cual cualificado personal de establecimiento de muchas estrellas, ornamentó con inusitada elegancia la canción. Bueno, esta y las restantes en sonar, temas como Pornográficos (ofrecido bajo sugerentes proyecciones de fondo) o Accidentes leves, extraída del seminal álbum debut Cruce de caminos: temas que ya nuevos, ya viejos,  forjaron en su conjunto una delicada atmósfera de ritmos tan leves como agradables, más que adecuados para dejarse arrullar al calor del hogar en tardes como la de dicho viernes. Al del hotel, del gran hotel que vino a ser el auditorio dicho día, algo, calor (aunque en sentido artístico y figurado), que el público agradeció. Buenas vibraciones, al menos, para calentar el alma, en una noche en la que sólo nos faltó ver pingüinos con bufanda. ¿Más temas nuevos a destacar? Marilyn, en el que se contó con la presencia de Ion, hermano de Gussy, a la guitarra; Déjalo, Exceso de equipaje, canción a ritmo de rock ferroviario que en el repertorio de Fito sería un hit; La sabiniana Las noches contigo; Apretar los dientes (melancólica ranchera que nos recordó, y cómo, al Enrique Urquijo más “problemático” y genial) o La pregunta, en clave de rap y con guiño incluido a la indignación social imperante desde mayo de 2011. ¿Composiciones viejas? Pese a haber podido poner todas, una apuntaremos, por cuestión de espacio: Mi nevera, ofrecida con Patri Villanueva a los teclados.
Manteniendo la fórmula y continuando su progresión de forma imparable, Lucas y Gussy mostraron exitosamente las estancias de su hotel de muchas estrellas: ¿cinco? De muchas más. De tantas como canciones. Barracus, fruto del cruce de los caminos de ambos… O “una aventura extraña”, en palabras de Lucas: aventura que, extraña o no (creemos que de aventuras o de situaciones extrañas, las verdaderamente excitantes, surgen las cosas que realmente valen la pena), en cualquier caso ha visto saltar la chispa, la cual, a la vista del material altamente inflamable que contienen sus canciones, terminará prendiendo. Sorprendiendo a propios y extraños. Barracus, banda que, siguiendo con la presente metáfora, mantuvo la combustión a la perfección hasta el final, quedando rubricada la visita guiada por las dependencias de Gran Hotel con el stoniano Salir corriendo, brindado a lo grande. Como ellos. Como su hotel de canciones. Muy bien.





Barracus, primer videocil de Gran Hotel: déjate mecer y estremecer por sus canciones

INDECENT-EZ, PASARON POR EL BLACK





La historia de Indecent-Ez, grupo radicado en Burlada, comienza en Satrustegi, Sakana,  hacia 1997, cuando tío Fletxa y sobrino Humano comienzan a hacer sus pinitos con las guitarras. Tras las habituales entradas y salidas de músicos (consustanciales en sus inicios a todas las bandas), la actual formación no se estabiliza hasta casi diez años más tarde, con las llegadas de Iñaki, Vicky y Abel, quien trae consigo un giro notable a la hora de concebir el enfoque musical definitivo y las letras de las canciones. La última en llegar fue Maite, acabando de adornar y de completar el hacer de un grupo de indecentes cuya principal prioridad, ahora mismo, pasa por intentar salir por donde sea. De asomar la cabeza como sea.  Por meter todo el ruido posible en aras de tal fin. A día de hoy cuentan con dos maquetas, la segunda de ellas, titulada El espejismo, portadora de un sonido más consolidado. De unas canciones que dejan entrever claramente el potencial del grupo, más que únicamente ganas. Así pues, como no solo de bandas consagradas ha de vivir la escena, el próximo MARTES, 7 de FEBRERO, les daremos a ellos la oportunidad de demostrarlo.









                     

1/2/12

MUY DEFICIENTE PASARON POR BLACK ROSE: SOBRESALIENTE POR LLEGAR Y POR EL CONCIERTO!!


El renovado grupo de rock cántabro Muy Deficiente lanzó su último trabajo, el segundo,  en marzo de 2011. Cada día, que así se titula el CD, fue grabado, mezclado y producido por Javi San Martín en los Estudios Sonido XXI de Pamplona, e incluye diez temas de rock en español, honestos, sin artificios y directos. Diez composiciones articuladas  sobre melodías pegadizas y unas letras características, dentro de lo que se podría  denominar “rock urbano del nuevo siglo”.
Muy Deficiente iniciaron su gira ante los suyos en la sala BlackBird de Santander: una nueva aventura llamada a llevarles por salas de toda la geografía estatal descargando la energía, frescura y vitalidad de la que hacen gala en sus directos. Unas inquietudes, emociones y locuras plasmadas en sus canciones, llenas de fuerza, melancolía y rock & roll.




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