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31/8/12

CIVICAN VERANO 2012, EN CLAVE DE ROCK: CONCIERTOS DE ARIEL ROT, LAS GAFAS DE MIKE, SONIC TOYS Y MANDANGA


Multitudinario Rot

Concierto de Ariel Rot

Fecha: lunes, 27 de agosto.
Lugar: patio de Civican, Iruñea.
Intérpretes: Ariel Rot, a las guitarras, a los teclados y a la voz.
Incidencias: última de las citas programadas dentro de la programación veraniega Escena Civican. Hora y 30 minutos de duración, bises incluidos. Buenísima asistencia, público heterogéneo que se mostró entregado.

Memorable. Para no olvidar, he aquí cómo resultó el concierto que ofreció el legendario Ariel Rot el último lunes de mes en Civican.
Presentada la finalmente multitudinaria actuación bajo la denominación Solo Rot, ante un público que para antes de las 20.00 ya había copado buena parte del recinto, el concierto arrancó de forma sorprendente, de manos de un viejo tema titulado Debajo del puente: todo un guiño al pasado por parte de Ariel, siendo como fue ese el título del primer LP que grabó en solitario, tras la ruptura de Tequila. Puro rock & roll dicha composición, característico y genuino rock & Rot –si se nos permite la licencia-, el bonaerense afincado desde 1976 en Madrid prosiguió guitarra eléctrica en ristre con temas de su propia cosecha, aunque más recientes, como Lo siento Frank, Dandy (de ritmo más ralentizado) o Felicidad, para acto seguido, con los efectos sonoros de sus guitarras como únicos aliados, recordar a sus paisanos Sergio Makaroff y Moris, versionando del primero la canción titulada Te busqué y del segundo, El rock de Europa: tema incluido en su LP Fiebre de vivir, para cuya grabación se contó con Tequila como banda de acompañamiento. A continuación, y hasta la recta final de la velada, las características letras, su reconocible timbre y las carismáticas maneras del que fuese músico de Tequila y Los Rodríguez encontraron en los teclados su aliado perfecto, adueñándose en dicha compañía de la noche hits como Cenizas en el aire o Dos de corazones, premiados con excelsas ovaciones por parte del respetable: de un público al que, en otro orden de cosas, el reconocido cantante trató en todo momento con cercanía y complicidad; un artista que se sintió súper cómodo sobre el escenario,  muy a gusto, como dejó entrever en un momento dado:  “llevaba tanto tiempo sin cantar que me siento como si me hubieran abierto la jaula”, tal y como tuvo a bien manifestar  antes de proseguir con temas igualmente bien recibidos, como Pólvora mojada. Finalmente, guitarra acústica en ristre, Rot invitó a la multitud a hacer suyo el Bar Soledad, a un gentío que, sin moverse de su sitio (tal vez porque les resultara imposible hacerlo, no cabiendo en el recinto ni un alfiler), siguió con reverencial silencio y atención el desarrollo del concierto. De una velada llamada a concluir con dos homenajes musicados, un primero, al poeta argentino de los años treinta Raúl González Tuñón (traducido en la interpretación de Eche 20 centavos en la ranura), y un segundo,  a su imperecedero hit Hace calor, brindado en clave de tango, con el que intentó cerrar actuación; algo que, evidentemente, a la vista del éxito cosechado, no logró, viéndose abocado el argentino a tener que volver sobre sus pasos sin llegar a abandonar las tablas tan siquiera, con el fin de sellar la función: algo que resolvió de inmejorable forma recurriendo a nuevas joyitas musicadas como El vals de los recuerdos y Milonga del marinero y el capitán, único guiño al repertorio de Los Rodríguez. 
Y así, de esta guisa concluyó tanto la sesión como la presente edición del ciclo Escena Civican: de forma impresionante, tal y como por su parte definió el gran Ariel Rot lo vivido nada más finalizar, mostrándose sin palabras –prácticamente- y muy emocionado. Una edición ésta perfectamente sacada adelante un año más.
Pues eso, impresionante. Suscribimos lo dicho por el artista. Multitudinario, Ariel en solitario. Y en 2013, más.




Fogosos

Concierto de Las Gafas de Mike      

Fecha: viernes, 24 de agosto.
Lugar: Patio exterior de Civican, Iruñea.
Intérpretes: Las Gafas de Mike, banda integrada en directo por Iván y Jon, a las guitarras, Javier, al bajo y a la voz, y Mikel, a la batería.
Incidencias: velada programada dentro del ciclo Jóvenes Artistas, incluida en la programación veraniega Escena Civican. 1 Hora de duración, bises aparte. Asistencia discreta.

Con el presente concierto concluyó el ciclo dedicado a reivindicar a los jóvenes artistas de Nafarroa, programación inaugurada el primer viernes de mes por Mandanga y que además ha acercado hasta el escenario de Civican propuestas como las de Sonic Toys, La Señora Nora y La Red Bullet.
Formados en Tutera en 2009 y protagonistas de una meteórica carrera, ante un público que no acudió en número notablemente reseñable, los denominados Las Gafas de Mike  abrieron fuego con un medley que comprendió dos temas, extraídos de que cada uno de los discos con que cuentan: Volver a volar y Ese soy yo, de su álbum debut y del segundo –respectivamente-, Hoy aquí, mañana allí, verdaderos compendios de su forma de entender el punk americano o pop punk. Y por dichos parámetros sonoros, por lindes estilísticas como las citadas –magistralmente trazadas por imprescindibles como Dikers  y exitosamente recorridas por otros como Pignoise o No Way Out- discurrió la actuación, dedicada, en otro orden de cosas, a sus cuatro convecinos fallecidos en el accidente del pasado jueves: alternando de forma realmente  fogosa el cuarteto temas de dichos dos trabajos; composiciones como Cuando ya no esté (primer single de su último disco) o Cuentos de amor, de dicho último CD, con otras como Me acuerdo de ti o Esta noche, con cuyos pegadizos ritmos atronaron el patio intentando por todos los medios involucrar al público en el concierto. Por ejemplo, en un primer momento, intentando que se pusiesen en pie, resultando baldío su esfuerzo. Pero pese a que finalmente sí que consiguieron en parte meter en harina al respetable (logrando que acompañaran con palmas las canciones o que tararearan ligeramente a propósito de algún coro) la sensación que quedó flotando en el ambiente fue la siguiente, que dicho público no era el suyo, brillando en líneas generales la presencia de jóvenes y rockeros por su ausencia, tal y como ha sucedido casi todas las noches. Es más, si tratándose del estilo de que se trataba, ni niñas había, por no haber…
Dándolo todo como en sus anteriores visitas a Iruñea (siendo esta su cuarta vez en la ciudad), supliendo con brío y empuje, con la ilusión y la fuerza propia de la juventud lo que con el tiempo, tras horas y horas de ensayos, se hará realidad, la velada encauzó la recta final con temas nuevos como El último viaje (dedicado, en palabras del cantante, “a las mujeres que se ganan la vida de cintura para abajo en cualquier carretera”) y Nuestro vicio favorito, llegando a su conclusión con el viejo y definitivo Siempre queda un rock & roll; pero como apenas había transcurrido una hora desde que irrumpieran sobre el escenario, todavía sonó algún tema más a modo de propina, como Entre cartones, entre otros.
Vencedores de la VI edición del Interpeñas de Zaragoza de 2011, los tudelanos Las Gafas de Mike ofrecieron un concierto digno en Civican, resultando del agrado de los presentes; y hoy, lunes, a las 20.30, cierre de Escena Civican, de la programación estrella de la casa a lo grande. Por todo lo alto. Con la presencia de Ariel Rot –nada más y nada menos-. Allí estaremos para contarlo.




‘Hardrock’ txapeldun

Concierto de Sonic Toys

Fecha: viernes, 10 de agosto.
Lugar: Patio exterior de Civican, Iruñea.
Intérpretes: Sonic Toys, trío integrado por Alex Sanz, a la voz y a las guitarras, Xabi Jareño, a la batería, y Adrían M. Vallejo, al bajo y a los coros.
Incidencias: velada programada en el ciclo Jóvenes Artistas, dentro de la programación veraniega Escena Civican. Hora y ¼ de duración, asistencia discreta, público heterogéneo que se mostró participativo.

En desigual batalla contra los elementos, principalmente contra la resaca presente en el ambiente tras el axfisiante calor que, todavía a la hora del inicio del concierto, se dejaba sentir en el patio. Y de qué forma: he aquí como se las vieron Sonic Toys en Civican, trío al que, desgraciadamente, en lo que a asistencia de público hizo referencia, le tocó bailar con la más fea. Banda que desde el prisma musical dio la de cal, recibiendo la de arena desde todos los demás, siendo como fueron víctimas de la ¿ola de calor? No. Del tsunami –directamente-, si se nos permite. Eso sí, en honor de la verdad diremos sobre los presentes que, aunque pocos (luciendo especialmente despobladas las sillas) quienes se dieron cita se mostraron totalmente por la labor, ovacionando al grupo tras cada interpretación, brindando palmas e incluso participando activamente de los juegos vocales planteados por el vocalista, en la recta final: un cantante de timbre más que apropiado para el hard y que lució en todo momento de lo más comunicativo y vacilón.
Ante un público en cuyas filas, al igual que la semana anterior, no destacó la presencia de rockeros, Sonic Toys ofrecieron una actuación de dos partes, en cierto modo: presididas ambas por la personal concepción del grupo del hardrock, teñido de AOR y de modernísima inspiración –a un tiempo- y tan yankee como descaradamente desinhibido; y lo cierto es que ambas partes fueron muy bien resueltas: una primera,  marcada por la interpretación de unos temas de regusto más melódico -aun sin perder los mismos ni un ápice de fuerza- y una segunda que enseñó la cara más rockera del grupo: con un Alex que hasta llegó a corretear guitarra en ristre por el patio,  marcándose incluso el baile del pato y brindando muletazos con forma de punteos al respetable… Como si estuviese en el albero -en tan peculiar vuelta al ruedo-, antes de protagonizar el momento acústico de la velada: baladita con él a la guitarra acústica, haciendo bueno aquello de que la excepción que confirma la regla.
Formados hace un año, en agosto de 2011, vencedores de la última edición de Encuentros y semifinalistas de la anterior; tocados -así las cosas- por la varita del éxito desde el principio, Sonic Toys desplegaron su buen hacer por medio de sus canciones en Civican, confirmando el buen momento que atraviesan. Jóvenes valores por excelencia de la escena del herrialde y grupo revelación –nos atreveríamos a decir-, demostrando encontrarse en un espléndido momento de forma, algo que plasmaron sobradamente con los temas brindados, tanto propios… como ajenos. En cualquier caso, eso sí, muy bien definidos y pergeñados todos ellos y, en el caso de los covers, perfectamente llevados a su terreno. Una banda esta, Sonic Toys, que tal vez lo único que no tenga a su favor sea el momento en que ha visto la luz. El haber surgido un tanto tarde en el tiempo: eso sí, no se nos malinterprete, circunstancia la citada en absoluto achacable a nada ni a nadie, claro está. Y es que en caso de haber surgido, por ejemplo, diez años atrás, creemos que sus posibilidades, aun no yéndoles mal, todavía hubieran sido mayores. Que de facto, gusto, descarada maestría y a por todas como parecen ir, las mismas tal vez se hubieran multiplicado por diez. Pero bueno. Inescrutables como son los caminos del rock, nunca se sabe. Una por una, a darle. A seguir dándole como hasta ahora. En ello están.




Bacanal de Rock and roll

Concierto de Mandanga

Fecha: viernes, 3 de agosto.
Lugar: Patio exterior de Civican, Iruñea.
Intérpretes: Mandanga, grupo formado por Miguel, a la voz, Imanol y Carlos, a las guitarras (este último también a los coros), Iñaki, al bajo, Iván, a los teclados, a la guitarra acústica y a los coros, y Rubén, a la batería y a los coros.
Incidencias: velada programada en el ciclo Jóvenes Artistas, dentro de la programación veraniega Escena Civican. Hora y ¼ de duración, muy buena asistencia.

A una con agosto arrancó la programación del patio de Civican, no pudiéndolo hacerlo mejor que con la actuación de los pamploneses Mandanga: sexteto que logró hacerse con el beneplácito y el fervor de los presentes, pese a lo complicada que, a priori, se nos antojó dicha empresa. Bueno, una plaza como esta y sus especiales circunstancias, teniendo en cuenta el horario del concierto, el estilo musical del grupo, el público al que teóricamente iba dirigido o el habitual del lugar, no integrado precisamente por rockeros: pero sí, acostumbrados a carros y carretas, con todo pudieron los de Iruñea.
Articulada la actuación sobre los temas de Aullidos, flamante primer CD del grupo, y reforzada por algunas versiones extraídas de la discografía de Estrago, viejo proyecto comandado por Aulló, el show comenzó con Cuando me pierdo, tema que, como la práctica totalidad, sonó por las lindes de un hardrock muy rico en melodías, perfectamente respaldado por los teclados y briosamente propulsado por las guitarras. La presente bacanal de rock and roll, he aquí cómo presentó el vocalista la actuación, deparó acto seguido cuatro temas más de dicho álbum, destacando entre ellos No me faltas y, principalmente, Muriéndome contigo, pegadiza canción con madera de hit que, rapeada por lindes realmente modernas, confirmó algo que pareció quedar claro desde el principio: la predisposición tanto de los músicos como de los presentes, un público integrado por jóvenes, mayores (preferentemente) y algunos niños… a pasarlo guay –tal y como reza  la letra de la canción-. Y es que a eso fueron y sí, así lo pasaron: un público en su inmensa mayoría tal vez poco acostumbrado a ver rock en directo pero que, damos fe, disfrutó de la experiencia, recompensando el hacer de Miki y los suyos con aplausos e involucrándose más y más en lo referido a participación a una con el desarrollo del show. Tras la interpretación de dicho tema llegó el momento del recuerdo; la hora de las versiones, rompiendo fuego la banda con Vida de perros, de Tijuana in Blue (banda en la que militó desde el primer día Rubén, el batería) y brindando además unos cuántos covers de Estrago: Por el forro, primer tema acompañado por palmas por los presentes; Cabeza loca, a ritmo de rumba rock, o Hada, cuento musicado por excelencia de dicha formación, banda que permaneció diez años en activo llegando a grabar tres discos. Finalmente el pase se centró nuevamente en el repaso del presente musical más inmediato de los músicos, retomando las sendas de Aullidos con temas como Fantasmas (muy en la línea sonora de Bunbury o Doctor Deseo), Orgía privada (respaldado masivamente por las palmas de todos) o Solos tú y yo, broche final cuyo estribillo incluso fue cantado por el a estas horas más que animado público, quedando un inmejorable buen sabor de boca general y haciéndose el respetable acreedor de un bis, por la labor.
Mandinga protagonizo el pasado viernes un concierto que, más allá de ello, representó  lo siguiente: una bonita forma de acercar el rock a otro tipo de público; a unas gentes que en otras circunstancias, en horario nocturno y sin sillas instaladas adelante,   difícilmente hubiesen acudido… o permanecido hasta el final. Y mucho menos, tal y como hemos indicado, participando del mismo. Del pase de Mandanga, la presente vuelta rockera de tuerca de Miguel Aulló y los suyos, inmenso en el escenario sacando adelante, que no a flote, su nuevo proyecto. Y el próximo viernes, en este mismo marco, Sonic Toys, ganadores de la última edición de Encuentros. Esperamos estar por allí.


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